QUE FUE LO QUE HICIMOS?..

No se, pero realmente me encuentro desconcertado al ignorar en que país vivimos producto de la anarquía -por decirlo de alguna manera- que interpreto se presenta no propiamente en los gobernados sino extrañamente en los entes componentes naturales del Estado Colombiano, ya que se parte de un supuesto natural, político y lógico que marcaría el derrotero establecido por el gobernante de turno y que no es otro que el verso con el cual logro catapultarse como tal seduciendo al ávido electorado.

Cuando se ve, como en Colombia, algo más que el incumplimiento de aquellas promesas que podrían interpretarse como todo lo contrario, es decir, con el aval del promesero, como cuando el traidor de Santos para obtener el favor del respectivo electorado juró a los pensionados la rebaja de su aporte a la salud del 12% al 4% y habiéndose tramitado y pasado lo objetó, invade el desconcierto total y absoluto respecto del gobernante, del País y de contera, del sistema que nos arropa finalmente.

Como nuestra sociedad justamente por los continuos episodios que suceden a ese nivel prácticamente no permiten digerirlos porque es cubierto, tapado y olvidado por el siguiente, recuerdo en los últimos días haber escuchado a Lorena Murcia cabeza visible de las victimas sexuales de las farc y al doctor Enrique Gomez Martinez apoderado de la familia del asesinado Alvaro Gomez Hurtado y, de tales voces interpretar algo muy diferente a lo pregonado en campaña por el hoy huésped de la Casa de Nariño que ridiculizando el famoso termino "trizas" simplemente dijo que en su gobierno no habría "ni trizas ni risas" en referencia al acuerdo de paz y a la jep que criticó de antaño, lo cierto es que todo lo contrario aparece en el panorama Colombiano: a Lorena Murcia -y lo dijo ella misma- no la ha recibido para escucharla al igual que la misma jep y, sin mas ni mas, a instancias de la misma jep que -itero- tanto criticó, el magnicidio de Alvaro Gomez Hurtado que sacudió y sacude a Colombia, el que tuvo a Ernesto Samper Pizano entre la espada y la pared por virtud de pruebas procesales y testimonios de paramilitares que le señalaban y le comprometían con el mismo, pasó a su conocimiento porque 25 años después el tal Lozada, a quien Santos le regalara una curul en el Congreso, simple y sencillamente manifestó que fueron las farc las que lo mataron; así, después de tantos años lo vino a reconocer, cuando, contrariamente las farc se reivindicaban episodios inmediatamente y éste, extrañamente, de semejante personaje publico, de quien tenia entre las cuerdas a Ernesto Samper Pizano, el único que le evidenció el elefante, el político cuya voz puso a pensar a Colombia, no les ameritó cuando el impacto que se causaría en su lucha armada hacia el poder hubiese sido enorme.  Y lograron su cometido: la Fiscalia ordenó la captura de Ivan Marquez con fines de indagatoria dentro de la investigación que espera de tiempo atrás el desplazamiento hacia los Estados Unidos para recibir los testimonios de los paramilitares que hicieron aquel señalamiento contra Samper, pero pudo mas la alucinante versión del Lozada.

Las promesas de Ivan Duque solo tocaron los aspectos cruciales del país que Santos había destrozado por completo en su afán de sacar avante el proceso de paz y de contera ganar el premio nobel respectivo: los acuerdos de paz y la jep, la seguridad democrática y el combate al narcotrafico, banderas del presidente Uribe que aquel mandó al carajo y que izaría nuevamente -lo prometió- de llegar a la presidencia pero que sencillamente olvido. 

Incongruencias con su postura de campaña van y vienen como nombramientos de personajes santistas adornan todo lo anterior, que, mirado en su conjunto, incluso el mas desprevenido se preguntaría a estas alturas del chico: que fue lo que hicimos?

Otrora el escenario político -lo dije en otro escrito- solo era adornado por el partido liberal y el conservador, pero ahora, ademas de sus rezagos cuando se tiene el coraje de admitir que aun se defienden sus principios, juegan dizque "el centro", "el centro centro", "el extremo centro" donde sintomaticamente se ubicó el mismo Ivan Duque habiéndose elegido presidente de la República por un partido de "derecha" como el Centro Democrático creado por el icono de tal corriente Alvaro Uribe Velez, etc., un sinnúmero de eufemismos con los que solo pretenden cubrir "la izquierda, el comunismo o socialismo" que es lo mismo y que debido a su inocultable desprestigio sus miembros pretenden confundir.